lunes, 22 de marzo de 2010

Explicación

El amor, ¿quién puede explicarlo?
¿Será solamente una idea preconcebida?
¿Una ilusión inherente a nuestro espacio?,
¿A nuestra inestable realidad?

Existirá aquella persona privilegiada
¿Qué podría asegurar sentir amor?,
¡¡Quién puede atestiguar sentir amor!!...
¿Sabría alguien el momento exacto en
que el amor comienza o
en que el amor acaba?

¿Estás condicionado amor?
Si es así dímelo…
¿Será por un sentido?,
¿Por un órgano que emite algún tipo de latido?
O ¿simplemente por un deseo
de llenar un vacío?

Cuéntame amor,
¿Hay alguien sobre este pedazo de materia viva
que testifique haberte dado o haberte recibido
por un momento ínfimo que sea en su vida?

Perdidos en el espacio y el tiempo
hemos pensado en recurrir
a un mundo desperfecto
para hipotétizar una respuesta
a esta cuestión que por un lado
le da vida a mis versos
y por otro acaba con mis sentimientos.

Cambiaría una y mil explicaciones
por el hecho de caer como un demente
en la creencia de que existes.
Por la posibilidad absoluta de llegar a
sentir algo parecido a ti,
que por siglos se pregona
de maneras indescriptibles.

Lo cierto es que toda relación
comienza con un capricho,
seguido de una ilusión,
que poco a poco cae en una cruda realidad
la que al final de los días vive
en el recuerdo borroso de momentos de fantasía.

Yo por el momento
No puedo explicar el amor;
Pero no niego que envidio
a aquellos que se arrogan poder hacerlo
Porque de esa manera se sienten vivos.
A pesar de que sabemos que es nuestro
Intentar querer explicar lo inexplicable,
ver sólo lo que estamos preparados para ver
y oir lo que a nosotros mismos nos llena el alma.

Yo no puedo explicar el amor,
Pero si tu crees poder hacerlo
No busque más explicaciones absurdas
Y vive de él con todas las fuerzas que te brinde el alma,
Con todas los latidos que deje tu corazón.
Vívelo con emoción
Con hidalguía, con coraje
Vive y disfruta del amor……

viernes, 5 de marzo de 2010

Confidencia


Cante el canario,
Desde la hinchazón de su pecho
El amor que te guardo
Representado en su dulce voz.

Extiendan las rosas
El perfume embriagante
De mis dichos escondidos
Para cautivarte con su olor.

Sean los frutos del bosque
Los que disimulando en su sabor
Exquisito me entreguen el
Misterio de tus sensaciones
Más profundas de placer.

Grille el grillo escandaloso
En la oscuridad de la noche
Y la claridad del día
Esa insignificante melodía
Que pasa casi desapercibida
Pero que representa el constante
Susurrar de mi boca
El amor que asumo en este escrito
que parece pequeñito
pero es grande en verdad
y complicidad
y delito.